¿Cómo nació la idea de la cafetería Coffee Tec?

Se preguntarán, ¿Cómo nació la idea de la cafetería Coffee Tec? Bueno, empecemos desde cuando Mario y yo éramos estudiantes foráneos Universitarios, era un día lluvioso, de esos del mes de junio, cuando íbamos en autobús  

en los asientos 13 y 14, a tramitar la reinscripción al que sería nuestro 7mo semestre de la carrera que estábamos estudiando, platicábamos de las aventuras que habíamos vivido el semestre pasado, el exceso de frio que hizo en los meses enero y febrero, en donde, cada fin de semana, nos reuníamos con otros estudiantes foráneos a beber algunas cervezas, hablábamos de gustos, además nos tirábamos carrilla, porque a Mario le gustaba una chica que hablaba con un acento medio extraño, y a mí, a una chica, las que les dicen, inalcanzables, pero, eso es otra historia…

Cuando íbamos a mitad del camino, a 2 horas de nuestro destino, llegamos a un lugar de descanso del viaje, en donde por alguna razón no desconocida, los dos requeríamos de un rico café, de esos cargados amargados con un toque de avellana, como me gustan, calientes, que hacen que soples al café, para bajar y sea un poco mas pasable por la temperatura, mencionando esto, Mario y yo nos quedamos observándonos y preguntándonos, ¿Qué temperatura, será la ideal para un buen café?, tema de investigación, concluimos los dos.

Al bajar del autobús, dirigiéndonos hacia ese centro de descanso, en donde había, además, otros productos nacionales de panes, la cafetera, los ingredientes, cucharas y demás cosas que se requieren para hacer un café, nos dimos cuenta que el lugar no era nada agradable para degustar de un buen café, los colores y la iluminación no eran del gusto para servir o degustar de un buen café, es solo de paso, me dice Mario, no seas exigente, lo cual hizo que me enojara, pensando, ¿ps este que trae? En mi mente, estaba corriendo a 1000 por hora, pensando, si voy a dar un buen servicio, debería ser el mejor a la redonda, si este está establecimiento esta así, ¿cómo estarán los demás?

Mario me trae el café, preparado por él mismo, me lo entrega en mis manos, en un vaso de unicel blanco, de esos comunes, algo pequeño para mis gustos, no renegué como la vez pasada, lo acepté y nos encaminamos hacia afuera del establecimiento, a lo cual, ni dos minutos pasaron cuando el chofer de la unidad nos dice a todos los pasajeros que estábamos afuera que subiéramos al autobús para continuar con el espacio, tal fue mi sorpresa, ya que el vaso de café, no tenía cubierta y no lo podía beber rápido, ya que el café se degusta y no se toma como agua,-Nos vamos a quemar y tirar el café, argumenté, a lo cual, por la premura del chofer, encendió el autobús, indicándonos que estaba por irnos, acto seguido, Mario y yo, tomamos de un buen sorbo de este néctar, perdiendo el buen gusto de ese mísero café.

Subimos al autobús y nos colocamos en los asientos que estaban destinados para nosotros, tenía un sentimiento de cero satisfacción, impotencia y enojo por el mal servicio que acababa de recibir, para esto, de nuevo, mi mente estaba pensando, ¿Qué mejoras le haría al servicio?, platicando con Mario, nos dimos cuenta que hay bastantes por ofrecer.

Al llegar a nuestro destino, nos dirigimos hacia nuestras respectivas casas. Al día siguiente, una vez descansados, nos encontramos en la pequeña oficina que rentábamos para hacer algunas ventas de un negocio que emprendimos con otros compañeros estudiantes foráneos, mismo, que exigía como en la Universidad, aumentar la parte creativa y analítica de nuestros cerebros, para lo cual, habíamos leído sobre incitadores de creatividad, y que muchas personas utilizaban para despertar estas partes del cerebro, era el consumo del café, por lo tanto, en la oficina teníamos café, en diferentes presentaciones, con cafeína, sin cafeína, soluble, de cafetera, chocolate en polvo, sin querer, estábamos creando un centro de inspiración combinando la oficina creativa con el espacio del café.

Pasando el tiempo, el espacio que estábamos creando, nos sentíamos muy cómodos, en donde generábamos grandes ideas para el negocio, en conjunto con todos los colaboradores, ideábamos y cumplíamos metas a nuestro alcance, pero, pensábamos en lo general que era suerte, suerte nada más, era la oportunidad de seguir creciendo; pero, ¿Qué tiene que ver todo eso? Mario y yo, llegábamos a preguntarnos, ¿Qué pasaría si estas partes creativas, se ponen a disposición de los jóvenes que requieren apoyo en su creatividad?, ¿de qué otras maneras podemos mejorar ese espacio y poderlo ofrecer?, estábamos hilando el nacimiento de la cafetería Coffee Tec, si se adecuan espacios para que los estudiantes con necesidades de inspiración o relajación, podemos ofrecer este tipo de espacio, comenta Mario, -¡imagínate! Tener esto en nuestras aulas de clases, en donde los maestros nos piden que innovemos, pensemos, necesitamos el plus de crear, de imaginar, soñar, con comodidad, con las cosas que a los jóvenes les guste, con acceso a tecnología, brindar soluciones.

Así nace, una idea, de un sueño, de una inspiración. Coffee Tec, tiene como misión ser un espacio Local en donde se genere inspiración de sus usuarios, brindando comodidad y deleitando el gusto con sabores acordes a las necesidades y preferencias, haciendo que el tiempo pase de lo más relajante, dejando huella en cada consumidor y en cada inspiración que nazca en este entorno.

Nuestra visión, es lograr ser una fuente de inspiración para la generación de ideas creativas y desarrollo de ideas para los estudiantes y no estudiantes de la localidad, con servicios comestibles, con un ambiente cordial, agradable y con una variedad de productos.